Iniciaré con el equipo, este puede estar integrado por el editor general, los investigadores, los diseñadores (editorial, multimedia y web), ilustradores y editores de fotografía digital, aunque si no se tienen los recursos para invertir en este equipo y no hay prisa basta con un editor, un par de investigadores y un diseñador gráfico, como en el que participé. Resumo el proceso de diseño en tres etapas principales, que son la planeación, la edición y la producción.

Durante la primera etapa se plantean los contenidos de la obra, es decir los temas que incluirá y quién la usará. Esto se puede definir de varias maneras, por ejemplo tomando una enciclopedia ya existente y mejorarla; o bien escuchar al lector para que aporte ideas. Esta última creo que es la mejor porque de realizarse el producto estará conforme a sus especificaciones, por supuesto respetando el programa oficial de la Secretaria de Educación Pública (SEP). Tales espeficaciones se convertirán en ventajas competitivas y su desplazamiento (venta) será mejor. Por ejemplo hago referencia a una enclopedia para primaria, cuyos contenidos son escasos, algunos datos son erróneos y poco útil para la autoevaluación según los alumnos, padres de familia y maestros de nivel primaria quienes la consultan. Bajo esta situación se puede iniciar a planear en primer lugar los tiempos de investigación, la redacción y el enfoque de los temas. Una vez concluida la redacción de textos y aprobada por la dirección editorial (aunque posteriormente se seguirán perfeccionando los textos e incluso se harán modificaciones de última hora) se procede a planear la parte gráfica.

En esta parte es recomendable hacer un pequeño documento (libro blanco) donde se especifiquen las características generales de la obra como el posible nombre, extensión, número de tomos, orden de los temas, estilos, paleta de color, retícula, páginas maestras y adicionales como el disco interactivo, estuche y el folleto informativo de la obra. De igual manera las subetapas de edición, por ejemplo primero se inicia con la lectura de textos para obtener ideas del diseño de las páginas, y los recursos de imagen como la cantidad de ilustraciones, fotos y esquemas necesarios para cada tema. Además debe definirse de dónde se obtendrán estos recursos (bancos de imagen, sesión de fotografía, archivos particulares, o si se van a generar). Si la imagen se va a comprar debe conocerse bajo qué condiciones (stock, royalty free, derechos exclusivos) para presentar la cotización y contratos previos a la dirección administrativa para su evaluación. Finalmente se planean las actividades, tiempos y personas responsables para cada una de las etapas de diseño.